Venezuela 2 Perú 2. La pelota detenida y la falta de definición.

La pelota detenida y la falta de definición de la selección nacional. Por lo menos no perdimos.  Está ocurriendo hasta en las divisiones inferiores, recuerden la Sub 17.  La Vinotinto que dirigió César Farías se mantuvo “viva” gracias a las faltas -cercas o lejos del área-  que cometían los rivales. Se incluyen los saques de esquina; cuando los rivales fueron más cuidadosos en hacer faltas en los sitios cercanos a su arco, la selección venezolana comenzó a ver a Brasil más lejos de lo que está.

Una vez más la pelota detenida surge como salvadora

La noche del jueves 23 del presente ante Perú, se aprovechó un saque de esquina al primer palo –que supuestamente un criollo iba a “peinar” hacia atrás- para que llegara un compañero en el segundo palo a rematar de cabeza. La peinó un cubano e igualito llegó Mikel Villanueva y la metió de “testa”. Luego vino el golazo de Rómulo Otero. Como para enmarcarlo.

Estas jugadas a pelota detenida son positivas, claro, siempre y cuando se administre bien la renta que eso genere; sino el virtuosismo que tiene nuestra raza futbolística en eso de pegarle como los “dioses” a la pelota detenida, se pierde, como ante los Incas.

La tranquilidad para definir

Nuevamente me voy a referir a la Sub-17. Ante su similar de Colombia en los últimos minutos del juego, los dirigidos por José Hernández, perdieron en el mano a mano con el arquero colombiano. Los comentaristas de la TV que transmitían  argumentaron que fueron los nervios, que era la juventud, y acaso esa deficiencia la acusaron los brasileños, paraguayos etc.  En ningún momento trajeron a colación esa debilidad que tienen nuestros futbolistas en todas las categorías. En ese sentido comparto plenamente lo escrito por el amigo  ingeniero Luis Rojas (Vive  en Maracaibo) donde asomaba esa deficiencia de los jugadores venezolanos. Tarea a aprobar por los entrenadores de las divisiones inferiores en cada equipo del país, porque un técnico de una sele cción no tiene tiempo para enseñarle a un convocado como hacerlo.

La selección venezolana dominó más en el primer tiempo porque le tocó la parte menos mojada y pudimos ver las proyecciones de Murillo, González por la derecha y por la izquierda a Otero y Felcher; quienes surtían de balones a Martínez y Rondón; pero solamente una o dos veces los delanteros pudieron probar sin suerte. Sólo las pelotas detenidas salvaron el trabajo dl primer tiempo.

  

Ante los peruanos el partido se pudo ganar tranquilamente 4 x 2 si Salomón Rondón y Josef  Martínez  -dos de los mejores atacantes venezolanos en el exterior- hubiesen tenido la frialdad suficiente para definir; cuando los peruanos ante la necesidad apremiante de descontar, dejaron suficientes espacios que invitaban al contragolpe, que se hizo, pero no se tradujo en goles por lo expuesto en este párrafo..

Pueden decir algunos colegas  que en la segunda parte el equipo se cayó  físicamente, que algunos jugadores no  tienen ritmo de juego en sus respectivos clubes y eso lo acusaron en la segunda parte, pregunto: ¿ Por qué Tomás Rincón terminó corriendo los 90 minutos, si él sólo juega 15 ó 10 minutos cuando  ingresa como recambio?.