Las Hermanitas de la Caridad o la Selección de Venezuela.

“Las Hermanitas de la Caridad”, podría llamarse la selección,  porque regalamos los goles. Sinceramente, no se puede ser tan generoso. “Tres regalos yo te traigo”, decía la letra de una canción de la orquesta  Billos Caracas Boys, dedicada a Maracaibo. Precisamente se han regalado tres partidos por errores individuales, coincidencialmente por tres jugadores que militan en el exterior: Osvaldo Vizcarrondo ante Paraguay, “Lobito”  Guerra frente a Brasil y ahora Franklin  Lucena  contra Bolivia. En el primero cuando ya no había  opción por el poco tiempo que quedaba y la ineficacia en el ataque; en el segundo comenzando…  y ahora en La Paz, contra Bolivia. Los dos últimos obligaron al cuerpo técnico a cambiar la estrategia y a navegar contra la corriente. Con estos errores no puede ni el mismo Pep Guardiola.

. “La idea era sostener la pelota, no la tuvimos. Creo que la presión boliviana fue grande y no tuvimos la jerarquía para sacarnos esa presión bueno lamentablemente, tuvimos un error en una entrega de balón y a partir de ahí el equipo se vino un poco abajo. Después de las siguientes cachetadas que nos dieron pudimos marcar dos goles. Es difícil hacer dos goles aquí en La Paz pero seguimos repitiendo errores en momentos claves y lamentablemente tuvimos otra derrota más”. Declaró Sanvicente en rueda de prensa.

La estrategia de salir con varios jugadores jóvenes no dio resultado. El desorden defensivo fue alarmante. No hubo coordinación. No se regresaba a tiempo a marcar, agregándose a todo eso los pecados individuales. Si no fuera por la gran capacidad que tiene el arquero Alaín Baroja, la goleada hubiese sido escandalosa.

“La visita, carente de imaginación, no tuvo margen para cambiar el destino de la pulseta, porque se vio superado en largos pasajes del pleito, porque la velocidad, los relevos que aplicó el anfitrión, desdibujaron su plan para volcar en el escenario miraflorino.” Escribió el colega boliviano Genaro Orellana en El Diario.

Nuevamente Rincón asumió la creación del seleccionado y explotando las bandas, dejaron en evidencias las falencias defensivas del local anotando dos goles y llegando varias veces con peligro sobre el “corral” de Vaca. Todavía cuesta entender como no incluyeron un volante ofensivo de salida, para poder tener más la pelota y mantener un equilibrio defensivo-ofensivo. Se salvan de esta lamentable actuación, además del portero Alaín Baroja; Mario Rondón, Tomás Rincón,  Richard Blanco y Luis Manuel Seijas  y José Manuel Velázquez.

Se viene Ecuador con todos los hierros, crecidos en fútbol y convicción de saber que pueden ganar en cualquier terreno y a los más grandes del subcontinente. Los del medio de la tierra manejan velocidad y técnica, algo que no es muy fácil de realizar, pero lo hicieron ante Argentina y Uruguay, bastante decir.